jueves, 20 de octubre de 2011

Una Visión Islámica de la Celebración de Halloween


UNA VISIÓN ISLÁMICA DE LA CELEBRACIÓN DE HALLOWEEN

Por: Said Abdunur Pedraza

Siempre que se acerca el 31 de octubre, vemos por un lado la avalancha publicitaria que invita a celebrar la “fiesta de brujas” o Halloween, y por otro, gran cantidad de folletos, notas y artículos en los que cristianos fundamentalistas, principalmente evangélicos y testigos de Jehová, califican a esta celebración de “satánica” e invitan a todos los creyentes a no sumarse a la tal fiesta. Como respuesta, también se han publicado varios artículos, por parte de los neopaganos, que rechazan la acusación de que se trate de una fiesta satánica, y aseguran que nada tiene que ver con “invocación de demonios.” Pero, ¿cuál es la postura del Islam al respecto? Para comprenderla, veamos primero un resumen de qué es Halloween, cuáles son sus orígenes, y qué se celebra en esa fecha en la época actual.

Halloween

En algunos países de Latinoamérica se le ha conocido como “noche de brujas,” y durante varios años, en Colombia, Alfonso Lisarazo, a través de su programa Sábados Felices, realizó una campaña intensiva para cambiarle el nombre a “día de los niños,” y así no sólo quitarle la connotación de festividad pagana, sino darle protagonismo a la infancia en el país. Sin embargo, en las últimas dos décadas, la hegemónica cultura angloamericana ha logrado que se celebre a la manera gringa y se le llame simplemente Halloween.

El origen de esta palabra está ligado al desarrollo sincrético de la Iglesia Católica de Roma. Una vez el cristianismo heleno de los griegos y macedonios seguidores de Pablo de Tarso fue nombrado como religión imperial romana, y las demás denominaciones y sectas cristianas, en su mayoría judías, fueron perseguidas y exterminadas (incluyendo a los nazarenos originales), la Iglesia de Roma debió consolidar su poder no sólo a través de la persecución de las demás religiones, sino absorbiendo buena parte de sus tradiciones y festividades. Así como la celebración pagana del Solsticio de Invierno fue convertida en la Navidad, y las fiestas indígenas americanas se convirtieron en lo que hoy conocemos como “fiestas patronales” en gran parte de Latinoamérica, la celebración pagana del fin de la temporada de cosechas fue convertida en la celebración católica de Todos los Santos. La noche de la víspera de Todos los Santos es llamada en inglés All Hallows' Eve, expresión que con el tiempo se contrajo a Hallow-e'en y por fin al moderno Halloween.

Origen Celta de la Celebración

Los celtas eran pueblos bárbaros contra los que combatieron largamente los romanos, principalmente en Galia y Britania. Tenían una religión animista y politeísta, caracterizada por los sacrificios humanos, y liderada por los druidas, sacerdotes-brujos que servían como médiums para comunicarse con los antepasados y con los espíritus de las fuerzas de la naturaleza.

Destruidos por los romanos, los celtas perdieron su cultura y su religión, y hoy día es muy poco lo que se sabe de ellos. Sin embargo, algunos defensores del “retorno a la antigua Europa” han pretendido “revivir” la mitología celta en algunas sectas de la new age como el druidismo y la wicca, que son más inventos modernos que verdaderas tradiciones ancestrales. Estas sectas neopaganas celebran algunas de las antiguas fechas paganas como el Samhain irlandés, fiesta de 3 días en la que se celebra el fin de la época de cosechas y el inicio del año nuevo celta.

La creencia pagana es que durante el Samhain, conocido como uno de los cuatro “festivales de fuego” anuales, se corría el velo entre el mundo de los ancestros y este mundo, asegurándose un “libre tránsito” entre el mundo de los vivos y el más allá. Entre las tradiciones estaba encender una vela por cada familiar que hubiera muerto durante ese último año, utilizar disfraces y máscaras para evitar que los muertos resentidos lo encontraran a uno y le hicieran daño o le maldijeran, y poner en las puertas de las casas adornos horrorosos para alejar a los malos espíritus. Los sacerdotes llevaban a cabo celebraciones para facilitar el paso de los muertos al otro lado, servir de médiums para que la gente pudiera comunicarse con sus familiares muertos, y realizar predicciones sobre el futuro.

Del Paganismo al Cristianismo

Invadidos los dominios celtas por los romanos (invasión que culminó con la conquista romana de las islas británicas en 46 a.C.), la celebración del fin de la temporada de cosechas fue absorbida por éstos y asociada a la celebración romana del día de la cosecha, que se llevaba a cabo los últimos días de octubre y primeros de noviembre en honor a la diosa Pomona. Ya que Pomona era la diosa de los árboles frutales, y la manzana era uno de sus símbolos principales, las manzanas se convirtieron en parte fundamental de la celebración de la nueva fiesta, mezcla de celta y romana.

Una vez establecida la Iglesia Católica Romana como la religión oficial del Imperio Romano, el catolicismo se constituyó en la única forma de cristianismo existente en el mundo. Pero quería ser, además, la única religión del planeta. Para ello, pronto descubrieron los líderes de la Iglesia de Roma que las persecuciones, torturas y matanzas no eran suficientes para lograr que la gente renunciara a sus creencias paganas y abandonara sus festividades. De modo que se decidió iniciar un proceso de sincretismo religioso, en el que parte de las tradiciones, festividades y creencias de las religiones paganas, comenzó a mezclarse con las creencias cristianas, derivando en doctrinas que nada tienen que ver con los textos bíblicos ni con las enseñanzas de los profetas, como la doctrina de la Santísima Trinidad, establecida en el siglo IV. Fue dentro de este mismo proceso de sincretismo que la celebración a la diosa Pomona fue absorbida por el cristianismo.

El Día de Todos los Santos era una celebración católica del 13 de mayo (procedente de la celebración del día de Todos los Mártires de la Iglesia de Siria), que tenía su sede principal en un panteón romano (templo pagano a los dioses de Roma) convertido por el papa Bonifacio IV en iglesia en 615. Pero el papa Gregorio III cambió en 741 la fecha de esta celebración al 1 de noviembre para absorber la festividad pagana de Pomona. En 840, el papa Gregorio IV ordenó que la fiesta de Todos los Santos se celebrara universalmente. Debido al cisma de los monofisistas del año 451, las antiguas iglesias orientales, incluida la Iglesia Copta, siguen celebrando el día de Todos los Santos en mayo.

El 31 de octubre, la víspera de Todos los Santos (Halloween) se convirtió así en parte de la celebración católica romana del 1 de noviembre. Muchos siglos después, en 1840, los irlandeses que emigraron a Norteamérica llevaron consigo su forma tradicional de celebrar esta fiesta, y de allí proceden buena parte de las costumbres del Halloween como lo conocemos hoy día.

La Costumbre de Tallar Calabazas

Según una leyenda irlandesa, existió una vez un hombre de tremenda avaricia y enorme maldad, que con sus engaños, mentiras y traiciones se hizo famoso como “competencia” de Satanás en el mal. El propio demonio lo visitó para comprobar lo que se decía de él, y dio fe de que estaba a su altura. Conocido como Jack “El Tacaño,” este personaje hizo una apuesta con el demonio, y al ganarla, éste no podría llamarlo al infierno. Jack creía que así se había librado del tormento eterno, pero al morir le fue negada la entrada al cielo por sus múltiples crímenes. Satanás lo rechazó también, y lo condenó a vagar por el mundo con un nabo hueco en cuyo interior llevaba un carbón ardiendo como única luz para guiarse. Así, se le terminó conociendo como Jack “El de la Linterna”, nombre que en inglés se abrevió a “Jack O’Lantern.” Los irlandeses y escoceses tomaron como costumbre el vaciar nabos, tallarlos y ponerles velas dentro a modo de linternas, para iluminar el camino de los difuntos en Halloween. Al llegar los irlandeses a Estados Unidos, descubrieron que era más fácil vaciar y tallar calabazas que nabos, y de ahí viene dicha tradición. También de ahí proviene el uso de los colores negro (por la noche) y naranja (por las calabazas) como símbolo de Halloween.

Dulce o Travesura

El famoso trick-or-treat proviene por un lado, de la creencia de que en Halloween se abren las puertas del más allá y los espíritus de los muertos tienen permiso para vagar libremente por el mundo, visitando a sus familiares y amigos, e incluso asustando o maldiciendo a quienes los trataron injustamente. Y por otro lado, de la leyenda de “Jack O’Lantern.” Se cree que Jack visita a la gente en Halloween pidiéndole a la gente que hagan trato con él o de lo contrario los maldecirá. Jack supuestamente ocasionaría enfermedad y muerte de animales, cosechas y hasta de los miembros de una familia, por lo que había que hacer trato con él, al costo que fuera. Siglos después, esto se transformó en la costumbre de realizar bromas pesadas durante Halloween. En Estados Unidos permanece la costumbre de ensuciar las puertas, pegar papel higiénico en ellas, o dejar en la entrada de las casas bolsas de papel incendiadas, conteniendo excremento animal. De ahí el “dulce o travesura:” Me das dulce o te hago una broma pesada.

En Dublín acostumbraban los niños a salir disfrazados pidiendo de puerta en puerta nueces o manzanas para la celebración de Halloween, lo que derivaba de la antigua fiesta a Pomona. En la antigüedad también se acostumbraba en Halloween sacrificar animales a los dioses (se sacrificaban aquellos animales viejos o enfermos que no sobrevivirían al invierno que comenzaba) y organizar comidas para compartir con la familia. A dichas comidas se invitaba a los difuntos. La gente también acostumbraba visitar a los sacerdotes o adivinos para conocer qué les deparaba el nuevo año.

Al mezclarse estas tradiciones paganas, derivó la actual costumbre de disfrazar a los niños para que pidan dulces, que es de origen bastante reciente. También la costumbre de los adultos de visitar “casas embrujadas” y realizar fiestas de disfraces para compartir con los amigos.

El Sentido Moderno de Halloween

Hoy día el Halloween es principalmente una fiesta comercial, en la que se busca aumentar las ventas de dulces y disfraces, se organizan concursos de disfraces y fiestas con venta y consumo abundante de alcohol, se llevan a cabo orgías, y algunos pocos grupos oscuros realizan misas negras, sacrificio de animales (principalmente gatos negros) e incluso sacrificio de niños y de muchachas vírgenes. Sin embargo, es principalmente una fiesta infantil que se celebra en colegios e institutos. La costumbre de que los niños salgan en la noche por las calles a pedir dulces se ha ido perdiendo por los riesgos de que los niños sean drogados, envenenados o abusados por algunos cuantos desadaptados y criminales, especialmente en las grandes ciudades. También porque en Halloween aumentan los casos de desapariciones, violaciones, asesinatos y profanaciones de tumbas. También aumentan algunos casos de tráfico de órganos, destinados a la decoración de “casas embrujadas” o a rituales “satánicos.”

Los neopaganos, por supuesto, celebran Halloween como forma de conectarse con tradiciones ancestrales y mantener vivas religiones “originales,” si bien desconocen que en dichas religiones el sacrificio humano tenía un papel preponderante, en especial en la religión druida celta.

El Islam y Halloween

Como hemos visto, la celebración actual de Halloween mezcla el ánimo comercial y de entretenimiento con antiguos rituales dedicados a la adoración de deidades paganas, a la adoración a los ancestros, a la supuesta “comunicación con los muertos,” y a actos de brujería y adivinación. Tanto en la actualidad como hoy día, muchas de las celebraciones de Halloween involucran el consumo de alcohol u otras sustancias embriagantes o narcóticas.

El Islam, por su parte, se fundamenta en el Taujid, la creencia en la absoluta Unidad y Unicidad de Un Único Dios Verdadero, Creador de todo cuanto existe, Dueño de toda adoración y de toda alabanza, Señor de cada ser humano. El Taujid rechaza, por tanto, cualquier tipo de adoración, ritual o no, a cualquier ser o cosa distinto de Dios. Dirigir oraciones a los santos, imames, profetas o estatuas para que sirvan de intermediarios ante Dios, es una forma de chirk (politeísmo). Hacer súplicas a los muertos, orar en tumbas, pedir favores o intercesión a personas que en vida fueron muy piadosas o a líderes religiosos, son formas de chirk. Y el chirk es el mayor de los pecados. También está prohibida en el Islam toda forma de adivinación y brujería, y todo intento de contactar con el más allá, puesto que si bien ello es imposible, abre la posibilidad de comunicación con los yin, seres de fuego que coexisten en este mundo con los humanos, pero en una dimensión diferente, y entre los cuales, como entre los humanos, hay algunos particularmente malvados, a los que llamamos demonios. Tratar de invocar a los muertos, lo único que puede lograr es permitirle a los demonios hacernos daño.

El Profeta Mujámmad (que las Bendiciones y la Paz de Dios sean con él) nos advirtió: “Cualquiera que imite a una nación, forma parte de ella.” (Recopilado por Dawud). Por lo tanto, los musulmanes debemos evitar cualquier ritual o celebración que sirva como adoración a cualquiera distinto a Dios, o que haya sido originalmente creado con tal fin, aunque haya perdido en parte su significación original. Esto es debido a que en el Islam, no sólo no podemos adorar a nada ni nadie distinto a Dios, sino que sólo podemos adorar a Dios en las formas que Él específicamente ha estipulado en el Corán y que Mujámmad (ByP) nos enseñó durante su vida. Quien imita las celebraciones de los Kufar (quienes niegan u ocultan la verdad al negar a Dios o ponerle copartícipes o asociados), es uno de ellos.

El Profeta Mujámmad (ByP) dijo: “Por Aquel en Cuyas manos está mi vida, se les ha ordenado que hagan el bien y prohíban el mal, o en verdad Dios les castigará. Incluso, sus súplicas serán rechazadas.” (Recopilado por Tirmidi).

Desde el punto de vista islámico, Halloween es una de las peores festividades que se celebran hoy día, debido a sus orígenes, a las costumbres que se mantienen desde antaño, a sus significaciones y a su simbología. Desde un comienzo, Halloween fue una celebración religiosa, una forma de culto, relacionada con brujería, adivinación e invocación de los muertos. Los cristianos lo absorbieron como una de sus celebraciones religiosas, y al hacerlo, cambiaron la pureza del mensaje divino por la conveniencia política para fortalecer la Iglesia. Los neopaganos lo han revivido como una celebración a sus deidades paganas, en parte como rechazo a la influencia cristiana en la historia de Europa. Incluso en su forma secular comercial, como entretenimiento para los niños, Halloween está cargado de ritualismo y simbolismo pagano, incluyendo el uso de imágenes, que está prohibido por el Islam. Por ello, la celebración de Halloween es Jaram (prohibida) incluso para aquellos musulmanes que la consideran inofensiva. El simple hecho de disfrazarse ya es problemático, debido a que el musulmán no debe jamás pretender ser otra persona, sino mostrarse siempre íntegro, honesto y veraz en todos los sentidos.

Los musulmanes debemos evitar imitar los modales y costumbres de los demás, en especial sus indecencias y sus rituales paganos. El Profeta (ByP) dijo: "No llegará la Hora Final sin que antes mis seguidores copien los actos de las naciones anteriores y los sigan muy de cerca, palmo a palmo." (Recopilado por Bujari).

Las únicas celebraciones islámicas son el Id Al-Fiter y el Id Al-Adja. Guardemos nuestros regalos, comidas especiales y energías para esas dos festividades, enseñemos a nuestros hijos a rechazar amablemente las invitaciones a celebrar las fiestas de los Kufar, no los disfracemos y no los enviemos al colegio ese día si allí se va a celebrar esta fecha. En su lugar, expliquémosles por qué los musulmanes no celebramos ese día. Y recordemos las palabras de nuestro Creador:

“¡Oh, creyentes! Los embriagantes, los juegos de apuesta, los altares [sobre los cuales eran degollados los animales como ofrenda para los ídolos] y consultar la suerte valiéndoos de flechas son una obra inmunda de Satanás. Absteneos de ello y así tendréis éxito.” (Corán 5:90)

“Y cuando se les dice: Acercaos a lo que Dios ha revelado y al Mensajero, dicen: «Nos es suficiente con lo que nos transmitieron nuestros padres», aun cuando sus padres no sabían nada ni estaban bien encaminados.” (Corán 5:104).

“¿Acaso no es hora de que los creyentes subyuguen sus corazones al recuerdo de Dios y a la Verdad que ha sido revelada, y de que no se asemejen a quienes recibieron el Libro anteriormente [judíos y cristianos]? A éstos, a medida que transcurría el tiempo se les endurecía el corazón. Y por cierto que muchos de ellos eran corruptos.” (Corán 57:16)

“Éste es Dios, vuestro verdadero Señor. ¿Qué otra cosa hay fuera de la Verdad sino el extravío? ¿Cómo entonces os desviáis? (Corán 10:32)

FUENTES:

Wikipedia. Entradas: Halloween, Samhain, Monofisismo. http://es.wikipedia.org.

Los Verdaderos Orígenes de Halloween, por Isaac Bonewits, traducción de Leonardo Sepúlveda. http://www.neopagan.net/Halloween-Origins_Spanish.html.

Halloween records usual level of heightened crime, arrests. http://www.collegiatetimes.com/stories/14578/halloween-records-usual-level-of-heightened-crime-arrests.

Halloween in Islam, por Huda. http://islam.about.com/od/otherdays/a/halloween.htm.

Halloween: Harmless or Haram? An Islamic Perspective, por Feyoun Khan. http://southernmuslimah.wordpress.com/2007/10/31/halloween-harmless-or-haram-an-islamic-perspective/.

Los Últimos Hallazgos Arqueológicos Bíblicos y la Autenticidad de la Biblia Actual. http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/04/los-ultimos-hallazgos-arqueologicos.html.

Juegos de azar en el Islam. http://www.nurelislam.com/licito/cap4-4.html.

Breve Historia de la Navidad. http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2009/12/breve-historia-de-la-navidad.html.

Crime Prevention: Halloween Safety. http://troopers.ny.gov/crime_prevention/Halloween_Safety/.

martes, 4 de octubre de 2011

¿Los Hombres son Superiores a las Mujeres?


¿LOS HOMBRES SON SUPERIORES A LAS MUJERES?

Reflexión sobre la obediencia de la mujer musulmana hacia su esposo

Por: Said Abdunur Pedraza


Albert Kazimirski de Biberstein es un hombre que pasa a la historia como el padre de las modernas traducciones retorcidas e islamófobas del Corán. Orientalista polaco judío, trabajó como intérprete de la Legión Francesa en Persia. Allí tomó la traducción del Corán hecha al latín por Ludovico Marracci en 1698, y con base en ella publicó en 1869 una traducción del texto coránico al francés. Marracci, en su época, buscaba desprestigiar al Islam y difundir todo tipo de falsos estereotipos y leyendas absurdas sobre los musulmanes. Y Kazimirski llevó esto a las nuevas generaciones de su tiempo, con creces. Gracias a ello, esta traducción, malintencionada y llena de comentarios que exhiben desde un desconocimiento profundo del Islam hasta una abierta islamofobia, ha servido de base a la mayoría de las traducciones en español que se consiguen en las librerías, y que son igual o peor de malintencionadas que esta: La de Juan Bautista Bergua, la de Vicente Ortiz de la Puebla, la de Joaquín García Bravo y la de J.C.P.R., son todas traducciones amañadas que buscan denostar del Islam, mancillar su nombre y fomentar el odio contra los musulmanes. Generalmente, cuando en los medios de comunicación o en los sitios Web se busca citar un aparte del Corán, descontextualizándolo para mostrarlo como una “atrocidad,” se cita alguna de estas traducciones.

Y precisamente cuando se trata de hablar de la mujer en el Islam, hay dos citas que son favoritas para atacar a los musulmanes: La primera es sura (capítulo) 2, aleya (versículo) 228. En la traducción de Bergua dice “que los hombres tengan preeminencia sobre las mujeres,” traducción casi idéntica a la de Ortiz de la Puebla. Y en la de J.C.P.R. aparece: “Los maridos son primero que sus mujeres.” Esta última agrega el siguiente comentario al respecto: “Literalmente: tienen un grado por encima; es decir, les son superiores.”

La segunda es 4:34 (que en las traducciones derivadas de la de Kazimirski aparece como 4:38). Bergua traduce: “Los hombres son superiores a las mujeres por el hecho de haber elevado Alá a unos por encima de los otros, y también por el hecho de ser los hombres los que gastan de lo que tienen (para las necesidades de la vida). Las mujeres virtuosas son abnegadas y conservan con cuidado en ausencia de sus maridos lo que con todo cuidado ha conservado Alá para ellas (su virtud). En cuanto a aquellas de las cuales teméis su mala conducta, advertidlas y relegadlas en sus alcobas y pegadlas, pero si os obedecen no busquéis otro camino contra ellas (no las repudiéis).” Por su parte, Joaquín García Bravo traduce: “Los hombres son superiores a las mujeres a causa de las cualidades por medio de las cuales Dios ha elevado a éstos por encima de aquéllas, y porque los hombres emplean sus bienes en dotar a las mujeres. Las mujeres virtuosas son obedientes y sumisas: conservan cuidadosamente durante la ausencia de sus maridos, lo que Dios ha ordenado que conserve intacto. Reprenderéis a aquella cuya desobediencia temáis; las relegaréis en lechos aparte, las azotaréis; pero, tan pronto como ellas os obedezcan, no les busquéis camorra” (este pasaje aparece idéntico en J.C.P.R.)

La palabra que García Bravo, Vicente Ortiz y J.C.P.R. traducen como “azotar,” que Bergua y Cortés traducen por “pegar,” y que otros traductores como Vernet traducen por “golpear,” es daraba. Esta es una palabra árabe interesante, puesto que tiene una enorme multitud de significados. Hace muchos años, un profesor de inglés me dijo: “Para saber si un diccionario de inglés es bueno antes de comprarlo, busca la palabra get. Si tiene menos de 20 significados y variaciones, el diccionario no sirve.” Pues bien, la palabra daraba es mucho más amplia en significados y variaciones en árabe que el get del inglés. Hay una completa disertación acerca de por qué es erróneo traducir daraba por golpear en el artículo “Sobre la Ilicitud de Golpear a la Esposa” [1]. Para resumir, cito a al-Fudhail ibn Aiadh: “Por Al-Lah, si no está permitido que lastimen a un perro o a un cerdo sin una razón válida, ¿cómo pueden lastimar a un musulmán?” [2] Con mucha menor razón puede el Corán incitar a la violencia contra la esposa. Todo maltrato y toda forma de tortura están prohibidos en el Islam, tanto contra animales como contra seres humanos, incluso contra esclavos, siervos o prisioneros de guerra. En ese marco general, el maltrato hacia la esposa es absolutamente inaceptable. La traducción de Mouheddine y Sánchez, una de las mejores al español hasta ahora (revisada por expertos en teología y en derecho islámicos [3]), muestra así el texto de 4:34:

“Las mujeres piadosas obedecen a Al-Lah y a sus maridos, y cuidan en ausencia de ellos [su honor y sus bienes] encomendándose a Al-Lah. A aquellas de quienes temáis que se rebelen, exhortadlas y dejadlas solas en sus lechos [sin cohabitar], o recurrid a otra medida para que recapaciten; si os obedecen no las maltratéis.” (4:34).

El Corán se refiere a la esposa rebelde y le dice al marido que, en aras de evitar el caos en el hogar, siga un procedimiento juicioso para calmar los ánimos y volver a la armonía: primero, hable con su esposa, llegue a un acuerdo, busque una solución diplomática. Si tras varios intentos eso no funciona, no vuelva a dormir con ella, quizá por una noche, quizá por varias, hasta que esté más tranquila y más dada al diálogo. Si pasa el tiempo y nada de ello funciona, busque darle un impacto, es decir: Usted, señor marido, es el que mejor conoce a su esposa, es el que mejor debe saber cómo impactarla, cómo llamar su atención, de forma que reaccione y cambie su actitud, sin lastimarla, sin recurrir a la violencia, sin poner en riesgo su integridad física y moral. Y en cuanto la esposa entre en razón, olvide el asunto, no guarde rencor, no insista en el tema, hable con ella y vuelvan a dormir juntos. El ejemplo lo tenemos en el Profeta (que las Bendiciones y la Paz de Dios sean con él), quien ante una rebelión general de sus esposas, se fue de casa y no volvió a dormir en ella durante aproximadamente un mes. Esa fue su daraba hacia sus esposas. Pero él jamás levantó su mano contra mujer alguna en toda su vida.

¿Y quién es una esposa rebelde? La que no es obediente a su esposo, así que veamos un poco más a fondo el tema de la obediencia de la esposa hacia su marido, que es el centro de este artículo. El arabista español Julio Cortés hace una traducción mucho más honesta, aunque desprovista del necesario conocimiento del Islam y de las ciencias coránicas. Él traduce “los hombres tienen autoridad sobre las mujeres,” donde los otros ponen “los hombres son superiores a las mujeres.” Por su parte, Hallak, un musulmán que hace una traducción más acertada, pone “los hombres tienen cierto predominio sobre las mujeres,” y Mouheddine y Sánchez: “Los hombres están a cargo de las mujeres.” ¿En qué consiste, entonces, la supuesta superioridad del hombre sobre la mujer, y la obediencia de la mujer hacia su marido?

Dios, en efecto, ha puesto al hombre un grado por encima de la mujer, mas no en el sentido de que sea mejor, preferido o superior a ella. Tampoco en el sentido de que sea más completo o mejor configurado. Sino que tiene un grado de responsabilidad por encima de ella, pues él es la cabeza del hogar, él debe proveer a la familia, y es él quien debe tomar decisiones y asumir responsabilidades en nombre de los miembros de su hogar. Y de allí deriva la obediencia que Dios le ordena a la mujer hacia su esposo.

El Profeta (ByP) dijo: «La mejor de las mujeres es la que alegra tu mirada, que te obedece y que, cuando te ausentas, no mancilla tu lecho y preserva tus bienes.» (Recopilado por Ajmad, Abu Dawud y Nassai).

También, el Profeta Mujámmad (ByP) dijo: «Si una mujer reza sus cinco oraciones diarias, ayuna el mes de Ramadán, obedece a su esposo y guarda su pureza, entonces le será dicho: ‘Entra al Paraíso por la puerta que desees’.» (Recopilado por Ajmad y Tabarani).

Y dijo (ByP): «Este mundo es solamente de conveniencias temporales, y el mejor consuelo en este mundo es una mujer piadosa.» (Recopilado por Muslim).

En la traducción de Mouheddine y Sánchez, se lee en 2:228:

“Ellas tienen tanto el derecho al buen trato como la obligación de tratar bien a sus maridos. Y los hombres tienen un grado superior al de ellas [porque en ellos cae la responsabilidad de mantener el hogar]; y Al-Lah es Poderoso, Sabio.”

Con base en estos textos, provenientes del Corán y de la Sunnah (tradición) auténtica del Profeta (ByP), pongo a consideración de los lectores las siguientes reflexiones:

  1. Toda organización, institución y estructura social humana requiere una cabeza, líder o representante. El matrimonio es una institución y Al-Lah ha establecido que el líder de la misma sea el esposo. Si él no ejerce correctamente esta función, el matrimonio colapsará. Si él delega esta función en su esposa, ella no podrá cumplir con sus funciones y habrá caos. Y si ambos asumen esta función, el matrimonio será un monstruo de dos cabezas. En un buen matrimonio, ambos cónyuges se colaboran mutuamente en el cumplimiento de sus funciones, pero cada uno tiene sus responsabilidades y su prioridad es cumplir con ellas. Por ejemplo, el esposo debe ayudar a su esposa con las labores del hogar, tal y como hacía el Profeta (ByP), pero no puede dedicarse a las labores del hogar y descuidar su trabajo, con el que provee a la familia. En este sentido, dijo el Mensajero de Dios (ByP): «Cada uno de vosotros es un pastor, y cada uno es responsable de aquellos bajo su custodia. Un gobernante es un pastor, un hombre es el pastor de su familia, una mujer es la pastora de la casa de su marido y de sus hijos. Porque cada uno de vosotros es un pastor, y cada uno es responsable de quienes estén bajo su custodia». (Recopilado por Bujari y por Muslim). Por eso, en 4:34 Abboud y Castellanos traducen “los hombres son los pastores de las mujeres,” en lugar del “los hombres son superiores a las mujeres” de las traducciones islamófobas.
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  2. Al-Lah ha asignado al esposo la función de ser el proveedor del hogar y le ha dado a la esposa el derecho a ser mantenida. Siendo así, el esposo invierte trabajo y dinero en la mujer, y ella lo respalda con sus atenciones y su obediencia. De este modo, él no se siente resentido por esforzarse y dar su dinero a alguien que se rebela contra él, y ella no se siente resentida por obedecer a alguien que no cuida de ella ni le provee lo que necesita. La mujer puede, si desea, trabajar y devengar un sueldo, siempre que esto no le implique abandonar sus responsabilidades en el hogar. Pero aún en ese caso, lo que ella gane es suyo y no tiene obligación de compartirlo con el esposo ni darlo al hogar. La obligación de mantener económicamente a la familia recae completamente en el hombre.
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  3. La obediencia de la mujer al hombre no puede ser ciega. En todos los casos de obediencia (a los padres, a los gobernantes, al esposo, etc.) hay un principio islámico básico: Ningún musulmán, hombre o mujer, puede obedecer a algo o alguien que lo lleve a realizar o le ordene hacer cualquier cosa que vaya contra la legislación islámica. La mujer, por ejemplo, no puede obedecer al esposo si él le pide tener relaciones sexuales durante la menstruación, o si le prohíbe hacer sus oraciones obligatorias. Del mismo modo que un soldado musulmán no debe obedecer a un superior que le ordene torturar a un prisionero.
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  4. Tomar decisiones implica asumir responsabilidades. Al-Lah ha puesto en el esposo la carga de tomar decisiones y asumir las consecuencias de las mismas, pues él es quien debe proteger a su familia, cuidar de su esposa y de su hogar, y brindarles lo que necesitan. Esto, sin embargo, debe realizarse con el método islámico: El hombre consulta con su esposa, incluso con los hijos u otros miembros de la familia si es del caso. Pero él es quien da la última palabra, tomando una decisión que debe ser siempre analizada teniendo en mente qué es lo mejor para la vida, la muerte y la religión de sí mismo y de los miembros de su hogar. Un hombre incapaz de tomar decisiones no podrá llevar el timón del matrimonio y esto llevará tarde o temprano al desastre. Un hombre que imponga su criterio sin consultar con su esposa, estará sembrando en ella la discordia. Una mujer que suela rechazar las decisiones que toma su esposo, será un lastre que hundirá ese barco.

En todo caso, el hombre que sólo busca oprimir a la mujer obligándola a obedecer sus caprichos, o que por terquedad tome malas decisiones de forma reiterativa, está actuando en contra de lo que el Profeta (ByP) enseñó, y eso puede llegar a ser causal de divorcio.

La obediencia de la esposa a su marido es muy importante, y esto se nota en las situaciones de crisis. Una esposa desobediente puede poner en grave riesgo a su familia al no confiar en las decisiones de su esposo y no seguir sus instrucciones en caso de peligro.

En resumen, siempre que el esposo se esfuerce en ser un buen musulmán, la mujer le debe obediencia, no por sometimiento a él sino por obediencia a Al-Lah. Por ello, la obediencia de la mujer a su esposo termina donde ésta entre en conflicto con su obediencia a Al-Lah.

En todo caso y en toda situación, la obediencia de la mujer hacia su esposo, y la forma como el hombre debe lidiar con la esposa si ella actúa de forma que pueda lesionar el bien del hogar en su conjunto, debe enmarcarse en el espíritu islámico expuesto en estos textos:

“Y entre Sus signos está haberos creado esposas de entre vosotros para que encontréis en ellas sosiego, y puso entre vosotros amor y misericordia.” (Corán 30:21).

“Al creyente que obre rectamente, sea varón o mujer, le concederemos una vida buena y le multiplicaremos la recompensa de sus obras.” (Corán 16:97).

El Profeta (ByP) dijo: “Las mujeres son la mitad gemela del hombre.” (Recopilado por Ahmad, Abu Dawud y Tirmidi [Ibn Al-Qattan: Sahih]).

El Profeta (ByP) dijo: “Los creyentes que muestran la fe más perfecta son aquellos que tienen buen carácter, y el mejor de entre vosotros es aquel que sea más bueno con su mujer.” (Recopilado por Tirmidi).

Abu Bakr una vez preguntó al Profeta (ByP) cuál era la mejor cosa para ser atesorada, y él (ByP) replicó: “La lengua en recuerdo de Al-Lah, el corazón lleno con agradecimientos hacia Al-Lah, y una esposa piadosa quien ayuda en los hechos virtuosos.”

“Ellas son vuestra protección y vosotros la suya.” (Corán 2:187).

Y nunca olvidar un consejo básico para todo matrimonio: “¡Oh, creyentes! Tened paciencia, sed perseverantes.” (Corán 3:200).

Y Al-Lah sabe más.

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NOTAS

[1] http://mensajesenlaruta.blogspot.com/2010/06/sobre-la-ilicitud-de-golpear-la-esposa.html.

[2] Tomado de “Manual para el Nuevo Musulmán,” Jamaal Zarabozo, traducción de Isa García. http://d1.islamhouse.com/data/es/ih_books/single/es_Manual_para_el_nuevo_musulman.pdf.

[3] La traducción de Mouheddine y Sánchez, publicada por IIPH, está disponible en http://www.nurelislam.com/coran/index.htm.

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